Las personas narcisistas necesitan y buscan por cualquier medio ser aprobados, admirados y respetados por todos quienes les rodean. El narcisista no tiene la capacidad de pensar en los sentimientos de los demás, lo importante es ser el centro de atenciones, adulaciones y con derecho de ver satisfechos todos sus deseos, aunque esto suponga ir a costa de otros, incluso aquellos clasificados como sus “mejores amigos”.
Se crean un mundo interior exitoso, poblado de fantasías, de belleza y grandiosidades, y tratan de hacer de su mundo interior el lugar más grandioso y perfecto, ignorando y escapando de la realidad. Se muestra totalmente encantador con motivos, puramente egoístas, y explota a los demás, utilizando “su belleza” le divierte engañar a los demás que confían en él/ella cometiendo desde fraudes materiales hasta sentimentales e infidelidades.
Pregona acerca de su alta autoestima, positivismo, honestidad haciendo o tratando de hacer sentir a los demás humillados, se esmera en hacer pensar que un lugar, fiesta reunión o relación no es lo mismo sin él/ella, se toma méritos que no le corresponden acusando y “salpicando lodo”, acusando de las faltas a la moral que ella/él mismo no aplica, porque ella/él está por encima de todos y no le corresponde ponerlas en practica, eso es para los demás.
El narcisista está centrado en si mismo, ocupado en fabricarse un mundo de perfeccionismo que sólo le pertenece a si mismo, está muy ocupado en manipular a otros para mantener su estatus de importante.
Entre los fenómenos que afecta a un narcisista están los arranques de rabia, frustraciones y arrepentimiento, que por supuesto no da a conocer, pero disfraza sus frustraciones, tristezas y hasta vergüenza haciendo creer a todo el que quiere escucharle dándole una mala interpretación a las buenas obras e intenciones de otros e incluso trata de destruir la buena imagen y reputación de los demás y puede llegar a jugar el papel de victima, “porque todos son traicioneros e injustos, menos el/ella.
Características de un narcisista:
1. Presumir de una desmesurada autoestima.
2. Grandiosidad.
3. Necesidad de aprobación.
4. Falta de empatía.
5. Desdén hacía sus parejas, amigos o familiares.
6. Arrogancia.
7. Adulación a si mismo.
8. Todos son mentirosos, sólo él/ella es transparente.
Sabemos que la autoestima es muy importante en todo ser humano, hombre y mujer debemos estar seguros de nosotros mismos, pero debemos también recordar que por ley de la vida, muchas veces estamos abajo y otras nos sentimos elevados hasta el cielo.
Es muy importante no convertirnos en nuestros propios ídolos, no caer en el narcisismo, amarnos a nosotros mismos es primordial, pero debemos saber amarnos con medida, reconociendo y aceptando nuestra limitaciones así como reconocer y darle los meritos merecidos a quien está por encima de nosotros.
Debemos reconocer nuestros errores y no culpar a los demás de nuestras decisiones equivocadas, ponerle limites al amor desmesurado hacia nosotros mismos, cuidando siempre de los sentimientos de aquel, de aquella, de los tuyos y de todos, solo la aceptación de nosotros mismos nos ayudará a aceptar a los demás, con sus virtudes y sus defectos.
No olvidemos que cuanto más alto nos elevemos, más estrepitosa será la caída.
¿Eres o conoces algún narcisista?
Amanecer cautiva del amor.
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Hace 2 años
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